11 oct 2017

El fin de todas la cosas, parte 2

Algunos Protectores habían sobrepasado la defensa de Evolution impuesta en la entrada de la sede científica, siguiendo los rastros de destrucción en uno de los elevadores descendieron hasta el gran almacén de reposición, una enorme estancia donde se reponía todo material necesario para los científicos en las columnas, que actuaban como depósitos y mediante cintas transportadoras llevaban la materia prima hasta cada sector de las siguientes plantas subterráneas.

- ¿Pero... qué cojones?

- ¿Qué es es todo esto?

Preguntaron varios Protectores en cuanto vieron el estado del almacén. Muchos de los depósitos estaban totalmente derruidos, con decenas y cientos de cajones metálicos y otras pertenencias básicas tales como cristalería de laboratorio, indumentaria y capsulas de contención. Muchas zonas del techo presentaban enormes huecos que conectaban con la superficie, de los que se desprendían muchos bloques sueltos de hormigón, llenando la zona de obstáculos, ruidos ensordecedores y nubes de polvo.