"Por más que estemos en un estado de alerta permanente, esto me está desquiciando. No hago más que recibir informes de guardias situados aquí y allá por la costa Oeste, desde Punta Esp hasta Deseo Ámbar. La situación está tranquila... Quitando a los piratas en mar y bandidos en tierra.
El Capitán General me advirtió que durante El Torneo de las Artes de Sangre, el estado era aún más vulnerable. Pero vulnerable... ¿De qué? Tenemos a los Protectores del Ojo en caso de que suceda lo peor, incluso tenemos al líder de ellos en nuestra capital. No puede pasar nada, todo cuanto veo por los reinos es paz, quieran o no algunos.
Pero el miedo siempre era algo presente en una persona en tiempos de incertidumbre. Algo que hacía que uno viera sombras donde no habían. Los piratas centraron su acción en las zonas alrededor de Primer Puño, baluarte de defensa marítima. De manera que para viajar hacia allí, ya sea por temas comerciales o marítimos era cada vez más difícil y se precisaba una escolta bastante abultada para que fuera seguro. Wartor Brad estaba también allí con motivo de la situación presente del reino.
¿Qué estaba ocurriendo realmente?"
- ¡¡ Capitán Maraad !!
La voz de uno de sus tenientes disiparon sus pensamientos y volvió a la realidad. Se encontraba en su despacho, en el Cuartel General de Punta Cuervo, era aún por la tarde pero ya había oscurecido. Tenía que redactar el informe diario, que una vez más era un informe rutinario, sin nada que destacar.
- ¡¡CAPITAN MARAAD!! ES URGENTE, SEÑOR.
La voz de su teniente volvió a sacudir su despacho y el sonido de la puerta era continuo. Strand le mandó a entrar para ver que ocurría.
La puerta se abrió y entró una persona bastante joven pero no obstante, alta y fuerte. Su teniente, Varien Stalkrough entró con una cara de preocupación que puso bastante nervioso a Strand.
- ¿Qué ocurre teniente? ¿Qué es eso tan urgente?
- Señor, hace unas horas hemos conseguido abatir uno de los barcos piratas, a pocos kilómetros de Puerto Lechuza. No hubo supervivientes en el bando enemigo salvo uno, al que hemos llevado a la ciudad portuaria para interrogarlo sobre los movimientos de los demás capitanes. El hombre no hablaba, como si sus labios estuvieran sellados. Así que fuimos a visitar al Maestre Marvek, ya sabe usted, el mago de...
- Sí sí, se muy bien quién es -. Le interrumpió Strand, impaciente -. Prosiga.
- Bien, pues fuimos a visitarle para que nos ayudara con el interrogatorio. Le aplicó un hechizo que hizo hablar al pirata con tanta facilidad como si realmente deseara delatar sus planes. Y... -. Varien tragó saliva y respiró hondo-. Y... Señor, es horrible.
- ¿Qué ocurre, teniente? ¡No me haga perder el tiempo!
- Señor... El pirata confesó que una persona a cargo de un reino extranjero les pagó a él y a todo el resto de tripulación para que atacaran cerca de las costas de Aldmet. Están al cargo de alguien, que actualmente se encuentra en la capital y que tienen la intención de invadir Aldmet en menos de 48 horas, señor.
La cara de Strand se palideció casi al instante. Si eso era cierto, todo este tiempo, el tema de los piratas había pasado de ser un acto a nivel de vandalismo a ser una cortina de humo para una invasión.
- Teniente ¿Estás seguro de todo esto? -. Dijo con total seriedad, abandonando la actitud impaciente que tenía hace unos segundos.
- Totalmente, señor. Aquí está el informe del Maestre de los métodos que ha utilizado. Y aquí el informe del interrogatorio, con todo al detalle.
- Muy bien -. Dijo mientras cogía dichos informes y los revisaba -. Puede retirarse, teniente. Buen trabajo.
Mientras Varien salía del despacho, Strand tiraba el informe que debía mandar a Aldmet para indicar la situación. En él estaba redactado en mayúsculas el ordinario "INFORME RUTINARIO" indicando que no pasaba nada. Cogió un pergamino y empezó a redactar el nuevo informe.
Strand Maraad, capitán de la guardia de la costa Oeste de Aldmet.
Reporte número 42.
Ciudad de Puerto Cuervo. 19:37 del día 22 de Diciembre de 957.
Reporto asunto de gravedad. Nivel 1 de prioridad del Reino.
Los piratas que han estado llevando tanta actividad durante las últimas semanas en las costas no son más que una cortina de humo para tapar sus verdaderas intenciones. Están contratados por alguien el cual, según el informe del Maestre Marvek, ni siquiera pudo sacarle el nombre durante el interrogatorio. Solicito de inmediato refuerzos en la costa Oeste, aunque probablemente la invasión no será únicamente por esta zona.
Insto al Rey Barlis a que convoque un gabinete de crisis para dirigir esta situación y que actúe de inmediato para defender a los habitantes de Aldmet.
Adjunto también los informes del interrogatorio y del Maestre Marvek.
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