Tras investigar el aserradero y descansar, volvieron a Reposo de Taliyah conscientes de que se había perdido la cobertura, ya que Lilith consiguió hablar con Clara poco antes de entrar en el aserradero. Y las peores sospechas de un herido Adaim se confirmaron: La ciudad estaba bajo ataque. Multitud de monstruos habían desperdigados por las calles y habían ocasionado incluso decenas de focos de incendios. Una de ellas logró volcar el coche cuando iban camino de la casa del alcalde Rurkro, que fue la decisión final del grupo porque sabían que aquello era la distracción para ir a por él. Adaim estaba indispuesto por las quemaduras y las contusiones, así que les pidió a las chicas que se adelantasen para llegar cuánto antes.
Por el camino se encontraron con un grupo de alumnos de 3ºC que defendían una pequeña multitud de civiles. Los enemigos, conformados por constructos y criaturas dracónicas, fueron reducidos ante la mayoría numérica y el trabajo unido de los alumnos de la academia. Luego, se dividieron en dos grupos. Mientras que la mayoría fueron a socorrer a más civiles, las tres chicas reanudaron la marcha junto con Jorgen Bale y Lunia Hernz. Al llegar, parecía que la casa se encontraba en perfecta calma, pero cuando se acercaron a la puerta de la verja, atravesaron un hechizo de ilusión que rodeaba todo el recinto, descubriendo lo que de verdad ocurría dentro.
El lugar estaba bajo ataque. Decenas de robots autómatas con armas de fuego atacaban a los guardaespaldas y acababa con ellos sin piedad alguna, así como también ocurría con los mayordomos que, para su desgracia, se cruzaban en el camino del enemigo. El alcalde no se encontraba allí, así que siguieron a Dwayne para ir a ayudarle cuanto antes. No obstante, Summer se separó momentáneamente para que, junto con el sortilegio de Ellie, socorriesen a Lydia Lumiere, secretaria y aprendiz de Rurkro.
Unos minutos más tarde, se encontraron con Dante, la mano derecha de Beatrice, al lado de su señora. Estaba malherido después de luchar contra Tousen, aunque este estaba enmascarado y con una peluca rubia. Summer no tardó en gritarle su nombre, lo que cambió el plan de acción del ya ex-forestal, aumentando su prisa para elaborar el plan. Beatrice se sorprendió de la aparición de alumnos en aquella zona durante aquel desastre, pero estaba tan desesperada debido a lo cercana que estaba de la muerte, o ella, o su mano derecha, que pidió auxilio olvidándose de las normas. Summer y Lilith se quedaron para ayudarles y atender a los demás heridos, como Dwayne que también había fracasado en intentar detener a un implacable Tousen. Lo que significó que Ellie se adelantase ella sola a intentar detenerle.
Al darse cuenta de que su perseguidor se había reducido a uno solo, y encima sabía muy bien quién era, Tousen se detuvo para experimentar con ella. Menciono el hecho de que Ellie sobreviviese al disparo que le produjo su compañero en el parque Maxwell, en Tilos, y de cómo pudo haber sido posible, ya que confiaba en la potencia del disparo que le hizo. Así que en aquel momento le cercenó los tendones de los brazos para dejarle sin la capacidad de conjurar la mayoría de su repertorio. Tras eso, hirió de gravedad a Jorgen Bale, que se había aproximado para dispararle, aunque en vano. Al ver que Ellie no conseguía regenerar las heridas, redujo las posibilidades de por qué se produjo aquella regeneración repentina. Mencionó que seguramente fuese debido a Michelle Black, debido a la cercanía que tiene con ella, lo que le convierte en un sujeto de pruebas magnífico.
Tousen volvió a ponerse en marcha y Lilith usó parte del brebaje del elixir del sol en Ellie para regenerar las heridas y devolverle la movilidad en los brazos. Al llegar a la última parte del tramo, descubrieron que Tousen estaba enfrascado en una lucha contra RJ y Veera, además de Anabelle, que se encontraba con su brazo enyesado. Tousen mencionó que el hecho de que la líder del GOET se encontrase allí podría suponerle grandes problemas, de no ser porque tenía su brazo incapacitado y no podía conjurar correctamente. Pudo encargarse de RJ y Veera con relativa facilidad, a pesar de que teóricamente pertenecían al mismo escuadrón de la guardia en Reposo de Taliyah. Hirió con gravedad a RJ, que cayó al suelo desplomado, y siguió luchando contra Veera hasta dejarla indefensa, sin que la capitana forestal pudiese sentir nada a su alrededor. El potencial de Tousen era tal que dejó a Anabelle sin poder respirar con tan sólo mostrar su verdadera arma, una katana con dos gemas engarzadas; una blanca y otra negra. Ellie pudo rescatar a su madre y la dejó bajo el cuidado de Lunia, mientras que las tres chicas intentaban cooperar al máximo para poder detener al traidor. Pero era imposible. A pesar de las heridas, Tousen se reponía a cualquier intento de ofensiva por parte de las jóvenes heroínas. Entre los golpes, Summer le preguntó que por qué hacía todo aquello; por qué mataba sin dudarlo. Tousen respondió que para su organización, Réquiem, todo esto no era más que una tarea secundaria por tal de conseguir su verdadero objetivo.
Para terminar la tarea del todo, ya que Tousen se encontraba muy cerca de donde estaba Rurkro encerrado, intentó hacer que Summer perdiese el control. Le habló sobre sus hermanas y terminó enseñándole la tablilla Aoshan, que se encontraba manchada de sangre que no era suya. Summer perdió las fuerzas y le dolió mucho la cabeza, pero al final intentó mantenerse serena y acordarse de las cosas buenas, antes que perder el control y convertirse en un monstruo despiadado. Harto de jugar, Tousen se dispuso a liberar su poder para terminar el combate. Envolvió el campo de batalla de un manto negro que dejó en un vacío los sentidos de las chicas. Aquel pudo haber sido el final, pero Anabelle logró disiparlo a tiempo, aunque por ello tuviese que llevarse un feo corte que la dejó incapaz de poder participar más en el combate. Lilith también acabó igual cuando se puso enfrente de Ellie, el objetivo del ataque de Tousen, para protegerla del ataque y llevarse la peor parte. Pero Lunia, con sus poderes curativos, pudo salvar a la madre de Ellie y también levantar de nuevo a Lilith para que pudiese seguir luchando. Tousen, consciente de que lo ideal sería acabar con la sacerdotisa antes de seguir, cargó contra ella. Pero el golpe fue detenido una vez más, esta vez por Magrid.
Tom había traicionado a Tousen. Desde hacía mucho tiempo, en la Convención Real, cuando vio a Liv herida, se dio cuenta de que todo lo que hacía era lo contrario a lo que realmente quería; que sus actos habían sido impuestos a traición por el miembro de Réquiem para usarlo como herramienta. Desde entonces, decidió cambiar. Se puso como objetivo recuperar la tablilla Aoshan, pero no sería para dársela a Tousen sino para ayudar a Liv con el tema de la traición que sufrió en su aldea. También comenzó a debilitar el sello que Réquiem le había impuesto para no hablar de nada sobre Tousen, y con ello pudo contar cuál era el siguiente movimiento del traidor forestal, aunque tuvo que hacerlo pareciendo que el plan era suyo. Ahora, se había culminado el desligamiento con Réquiem, apareciendo allí y anunciando que la ilusión que mantenía los terrenos del alcalde protegidos de la vista ajena se había disipado, lo que era cuestión de tiempo que fuese atrapado.
No obstante, en su momento, Tousen valoró seriamente el que por entonces era una mínima posibilidad de que Magrid le traicionase, y consiguió un seguro. No todos los hombres de Magrid le deben demasiada lealtad, así que movió los hilos para conseguir desligar a Seil de su lado y así tenerla de rehén. En otras palabras, Tousen se adelantó a Magrid y consiguió ganarse la lealtad de alguno de sus hombres para disponer de un rehén valioso para él. Invocó cuatro siluetas acuosas y oscuras, anunciando que una de ellas era Seil, que se encontraba allí con él. Magrid no podría pelear bien sabiendo que podría hacer daño a la persona que amaba. Pero no tenía otra opción; no bajó la determinación de nadie.
Magrid y las chicas lucharon en equipo y elaboraron un plan de acción en conjunto para intentar separar a Tousen de su poderosa arma. Unidos, eran una combinación invencible, pero si lograban arrebatársela, podrían capturarlo. Por un momento, a todos se le encogieron el corazón cuando Lilith pudo quitársela y Ellie estaba a punto de envolver al enemigo con vientos apresantes. Pero Tousen logró zafarse en el último momento, acercándose a Lilith y recuperando su arma para, esta vez, romperla y disponer de todo su poder. Con ella, paralizó a cada una de las chicas. Magrid intentó aprovechar la atención de Tousen en ellas para poder darle el golpe definitivo, pero este logró desviar el golpe y que le diese a la propia Seil. Durante un instante todo se quedó en silencio, pero al final resultó que era un engaño. La hermana de Summer se encontraba con Tousen pero no allí, aunque para cuando pudo darse cuenta Magrid, ya fue demasiado tarde. Recibió un tajo fatal que separó su brazo izquierdo y parte de su torso del resto de su cuerpo. Ahora ya tan sólo quedaba Rurkro.
El alcalde salió y sostenía en su mano una reliquia rectangular, parecida a una carta con relieves y grabados. Con ella pudo cercenar las extremidades de Tousen con facilidad, pero este pudo adelantarse y también herir de gravedad al alcalde. Al final, con todas las heridas que tenía, pudo conseguir aquel artefacto: una Carta Celestial. Llegaron refuerzos, en forma de Cleo y Lucia que descendían a por el traidor, pero no pudieron llegar a él, ya que profirió la palabra "Esperanza" y con ello se activo el hechizo de Palabra de Regreso.
La tragedia se había consumado. La ciudad había sido atacada y habían cientos de heridos en todos lados y daños estructurales. Allá por donde pasó Tousen los afectados se contaban más por muertos que por heridos, como era el caso también de RJ, cuyo cuerpo inerte yacía en el terreno de combate final. Por un momento, Summer aprovechó el estado en el que le había dejado Tousen para poder usarlo de manera positiva y regenerar a Magrid, sanándole. Lilith usó lo que le quedaba de elixir del sol en Rurkro para salvarle la vida y Cleo descargó su frustración en forma de golpes al suelo. Se lamentaba de haber tenido que involucrar hasta este punto a las chicas y su estado de ánimo se había derrumbado por todo lo acontecido. Confesó también que las llamadas eran de sus padres, insistiendo en que aceptase la operación que podría devolverle la movilidad en las piernas, pero era una cobarde. Ella misma decía que cómo iba a poder dirigir nada y mantener el optimismo en las personas si luego ella era tan cobarde de no aceptar la operación por el miedo que tenía la posibilidad de que saliese mal y se quedase aún más inmóvil o muriese.
Y al día siguiente, el fuego pasó a las brasas y a las cenizas. Lo peor había pasado, pero ahora había llegado el momento de asimilarlo; aprender del dolor y seguir adelante. Réquiem oficialmente ha hecho su aparición, pronunciando la primera palabra.
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