La sesión comienza mientras el grupo vigilaba la zona desde lo alto de la montaña más cercana. Mientras repasaban sus opciones y valoraban los recursos que podrían usar, decidieron el plan que llevarían a cabo con la esperanza de que todo saliese bien.
El plan transcurrió de la siguiente manera: primero Kizaru, invisible, se marchó con la licencia de David y un mensaje que avisaría al misterioso asesino que no se había mostrado aún de que se esperase a su movimiento; por otro lado Maryse se encargaría de boicotear la vigilancia encima de la muralla y de anular las comunicaciones, mientras esperaba para ayudar a quien lo necesitase; David junto a Hina se encargarían de evitar la tentación de saquear las riquezas de los bayanes, encontrar los explosivos y hacer que la montaña justo al lado del ritual para invocar a una criatura demoníaca fuese boicoteado; Elisabeth y Vanessa por su lado se encargarían de cubrir el portal de teletranspotación inversa que sospechaban que traería al Nómada y por último Melina, Dafne y Ellie irían a rescatar a los rehenes.
El plan se ejecutaría en primer lugar de una forma excelente, el grupo se asentó rápidamente en la batalla y llevaron la delantera practicamente en todo momento, la montaña se desprendió sobre el ritual de la criatura, que uno de los miembros de Victus solo puedo provocar que apareciese un poderoso muerto viviente que ayudó en combate, el portal de teletransportación inversa no fue alcanzado por ningún miembro de la banda y además el grupo que estaba junto a los rehenes consiguió rescatarlos rápidadamente a casi todos, y sobre todo los mantuvieron a salvo.
El misterio del posible aliado misterioro que había asesinado al bayán fue resuelto rápidamente, cuando Richardsen, el padre de Petyr, apareció para rescatar a su hijo y colaborar con el grupo de héroes. Juntos, colaborando e incluso provocando que los rivales que formaban parte de los bayanes y no de Victus huyesen por sus futuros.
Cuando la situación estaba más que controlada, los dos que parecián miembros importantes de Victus utilizaron palabras de regreso para huir pero para desgracia de los héroes, se llevaron a dos compañeros suyos con ellos, a los que manipulaban con la misma sustancia de la que parecía estar hecho el Incandescente.
Con los enemigos que habían dejado incapacitados y la situación controlada, Richardsen reclamó a su hijo el cumplimiento de una promesa que se habían hecho: “podrás ser un héroe pero si tengo que venir a ayudarte o rescatarte, tendrás que volver a Tilos bajo mi seguridad”. Petyr agachó la cabeza y no le quedó más remedio que montarse en el vehículo volador que les llevaría de nuevo a casa, no sin antes, despedirse de sus compañeros de academia.
El grupo tenía ante sí el dilema sobre lo que hacer entonces y tras un intercambio de información y el rechazar la idea de invocar al Nómada para entre todos intentar derribarlo al momento, todos se dividieron en dos grupos: uno se adentraría en los túeneles en la búsqueda del cargamente que viajaba a Serencia, que podrían ser Drifters y otro iría sin más dilación con los prisioneros que habían logrado hacer a Briatel para ayudar en la defensa.
Por último, el grupo que se adentraba en los túneles, formado por Maryse, Dafne, David y Ellie, recibió la compañía después de mucho tiempo de Lexi que traía consigo un pequeño paquete: un regalo que David había ideado para Ellie como muestra de respeto por ella y su familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario