Cuando los jugadores ya salieron de la ciudad, reunidos por fin con sus tropas, dieron las primeras ordenes tácticas de cómo avanzar con el ejército. Ike ordenó que fueran en formación de rombo, protegiendo los flancos, mientras que las tres partidas de exploradores se dividían en un semicírculo por delante de las tropas, a 5 Km de distancia, y que informaran constantemente.
Así pues comenzó el viaje del grupo a través del enorme, desconocido y salvaje Bosque de los Inquietos. Durante las primeras horas, el capitán de los exploradores de Svale les decía que hace unos años tenían aquí serrerías e incluso, alguna que otra mina; Pero desde que comenzaron a aumentar los ataques de bestias y caníbales, abandonaron los puestos. Llegó al primera noche y los jugadores formaron un campamento con empalizadas. Hennessey decidió adelantarse un poco para explorar cuando...
...Su perro, Epemuqi, comenzó a ladrar hacía su derecha. Le decía a su amo que había peligro hacía esa dirección. Entonces Hennessey escuchó un sonido de algo parecido a una cuerda tensándose, también el sonido de muchas patas moviéndose por el suelo y por último, avistó un punto rojo brillante a unos 10 metros de donde estaba él. Huyó de allí en cuanto antes e informó a los guardias, que se pusieron más alerta.
Horas después el capitán de la guardia despertó a los jugadores para informarles de que un cuervo volvió de la partida de exploradores al norte, venía sin informe y herido. Hennessey examinó al cuervo y le preguntó sobre el origen de las heridas. El cuervo se limitó a decir "PELIGRO, PELIGRO" y "MUERTE, MUERTE, TODOS MUERTOS". Raenia e Ike ordenaron la retirada del resto de partidas de exploradores y a estar alerta.
Pero el sueño no seguía fluido para los jugadores, esta vez fue Raenia la que se despertó. Lo veía todo borroso y no estaban el resto de jugadores en sus camas, estaba sola. Vio a una figura en el centro, sentado en la silla y dándole la espalda. Tras acercarse la figura se volvió más nítida y vio que llevaba arco, carcaj, ropa de explorador... Era su padre. Este le preguntó por qué creía que abandonó los exploradores de Cima Svale... Y le aconsejó que dejara a un lado la lealtad, la importancia del reino y diera media vuelta y se fueran de aquí. Tras eso, despertó pero ya no hubo más interrupciones durante el sueño de los jugadores.
Así pues un nuevo día se alzaba y los jugadores se pusieron en marcha. Primero pararon en el punto donde Hennessey avistó el punto rojo brillante. Encontraron huellas y una marca en un árbol de una flecha que indicaba la dirección que tomaban los jugadores. Tras comentar un par de cosas, escucharon un sonido en una rama al sur de ellos. Finalmente decidieron volver hacia la caravana.
Una vez llegaron al punto donde perdieron contacto con los exploradores la noche anterior. Encontraron a los exploradores muertos, con heridas de cortes, etc. Y también una gran cantidad de lo que Hennessey identificó como Hongos Hediondos, pegados a los cadáveres. Hennessey identificó también que los hongos eran inflamables, así que decidieron retroceder y meterles fuego desde la lejanía. Al hacerlo, los cadáveres explotaron y quedaron calcinados. Cuando volvieron tuvieron que esperar a que los exploradores volvieran a tomar distancia para ir en la delantera. Mientras tanto los jugadores observaron que faltaban algunos cadáveres y aunque investigaron a los alrededores, no encontraron nada.
Siguieron pues la marcha por el camino real, pasaron tres días y el camino continuaba por un entorno montañoso, por la falda de una montaña. Al final tuvieron que darse media vuelta porque la partida de exploradores informaron de que el camino estaba bloqueado por un desprendimiento de rocas. El capitán de los exploradores de Svale dijo que nunca habían tenido problemas de desprendimiento en esta zona, así que probablemente fuera obra de alguien o algo... A partir de aquí tenían dos opciones, o seguir por el bosque hacía el Este u Oeste. Los exploradores informaron que el camino del Este era el más seguro, el del Oeste en cambio ofrecía un descenso que podría retrasar a la caravana. Akshael dijo que lo que el enemigo quiere seguramente sea que tomen el camino seguro, así que optaron por ir por el Oeste.
La caravana siguió su travesía un día más, hasta que llegaron a una zona del bosque lo suficientemente densa para casi no ver el cielo. Lo inquietante era que tampoco se escuchaba nada, ni sonido de animales ni de ramas...Nada. Fue entonces cuando empezaron a llover Hongos Hediondos de las ramas de los árboles, cayendo en los soldados, que caían indispuestos al suelo en pocos segundos. Raenia ordenó que se refugiaran en la caravana, pero fue demasiado tarde. Una lluvia de flechas apareció de todos lados y masacraron a la mayoría de soldados. Tanto los capitanes como los jugadores optaron por una retirada, dejando de lado la caravana. Así que salieron a correr para refugiarse en una mina enana por recomendación del capitan de los exploradores de Svale.
Pero cuando llevaban unos 20 minutos corriendo, se pararon a descansar y escucharon detrás de ellos pasos. Una forma humanoide de más de dos metros de altura, con un arco y un carcaj con flechas a la espalda, dagas y espadas enfundadas en su torso y una armadura de cuero negro que cubría todo su cuerpo menos el brazo izquierdo, que lo llevaba al descubierto; En el brazo derecho llevaba un guantelete de hierro bastante grande. Iba encapuchado y con un parche en el ojo izquierdo. Los jugadores dudaban si huir o enfrentarse a él. Ike incluso dijo que podría ser un aliado (JAJAJAJAJA) y finalmente, le plantó cara. El sujeto, que iba avanzando en todo momento impasible ante lo que hacían los jugadores, se frenó al ver a Ike parado. Sacó el arco y se dispuso a disparar una flecha. Del arco, cuando estaba apuntando a Ike, se desplegaron una serie de mirillas. Finalmente disparó e impactó de lleno al jugador, empalandolo y empujándolo 20´ hacía atrás, dejándole bastante herido. Optaron finalmente por huir del sujeto y entrar cuanto antes en la mina.
Pero la situación se volvió más delicada cuando se adentraron en una zona del bosque cubierta por telarañas, huevos gigantes y capullos colgando de las ramas. Los jugadores empezaron a abrirse paso por la zona cubierta de telarañas hasta que el sujeto les recortó distancias y usó una daga para activar un mecanismo que disparaba cuchillas, cortando los huevos y liberando arañas. Los jugadores pudieron lidiar con las arañas pequeñas y seguir abriéndose camino para llegar a la mina. Sin embargo, arañas más grandes comenzaron a descender de los árboles. Al final consiguieron salir al claro y llegar a la mina.
La sesión finaliza cuando están en la entrada de la mina, hay un motor que abre la compuerta de entrada y las arañas gigantes empiezan a acorralar a los jugadores. Deben hacer funcionar el motor antes de que les terminen acorralando y mueran.
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