En el siguiente escenario, esta vez con piedra tallada y el entorno bien iluminado, debían lograr la apertura de la puerta que tenían frente a sí mismos. Para ello, tenían que devolver los pilares de ocho colores a sus respectivas bases, usando un sistema de teletransportes y teniendo cuidado de que dos o más pilares no coincidiesen en una misma habitación, ya que creaba un conflicto que les costaba tiempo. Summer movió uno de los pilares al comienzo y provocó uno de esos conflictos, pero aquella fue la única vez. Les llevó más de media hora resolverlo, pero explorando cada habitación y probando los teletransportes, lograron mapear toda la zona y conseguir todas las conexiones para poder llevar a cabo la planificación de las rutas más óptimas para obtener el mejor resultado posible.
Cuando se abrieron las puertas y pudieron pasar a la sala final de aquella planta, se encontraron de nuevo con el Titiritero. Este planteó una elección con los setenta y cinco minutos de tiempo que les quedaba; continuar hacía otro escenario, más difícil que los dos anteriores juntos, o luchar contra él. Completando con éxito cualquiera de las decisiones, completarían la prueba dos, así que el grupo se puso a meditar durante unos minutos qué era lo más óptimo para ellos, decantándose finalmente por luchar.
En el combate, el Titiritero demostró que realmente no era fuerte, ya que ni siquiera hirió a los integrantes del grupo. No obstante, su punto fuerte se basaba en afectar el tiempo que les quedaba, de manera individual y repartidos entre todos por igual. Sus ataques restaban, en ocasiones, varios minutos de tiempo, acercándose peligrosamente a cero; además, también invocaba criaturas cuya única función era apoyar aquella sustracción de tan valioso recurso que tenían para poder aprobar la prueba dos. En los instantes finales, el Titiritero cargó su más devastador ataque, una consecución de tres rayos negros como la oscuridad, cada uno más poderoso e intimidante que el anterior, que se dividían para afectar al grupo. Con este ataque, el contador de Summer llegó a cero y fue eliminada de la prueba, ante el horror de los demás. La desolación se había apoderado de los que aún estaban participando, ya que veían que su enemigo no caía aún con la cantidad de golpes y conjuros que recibía, mientras que este cargaba ese devastador ataque de nuevo. Dafne y Ellie casi son eliminadas en los instantes finales de la derrota del Titiritero. Y entonces, de nuevo en la vía del diálogo, este abrió una nueva vía para poder traer de vuelta a Summer.
'Summer volverá ante el sacrificio de uno de vosotros' fueron sus palabras. Ante aquella proposición, Andrei no dudó en absoluto y dio un paso hacia delante para sacrificarse por ella, aunque también lo hizo David con la misma atención. Dafne, la más afectada ya que Summer es su mejor amiga, no podía ni hablar. Ante aquel desconcierto, Ellie alegó que como líder del grupo, la única opción para no llegar a un conflicto era que lo decidiese ella; y ella se eligió a sí misma para sacrificarse. Andrei no podía aceptarlo, ya que confesaba que no se sentía merecedor de seguir en las pruebas, puesto que fue salvado por alguien ajeno al grupo durante la prueba número uno, pero igualmente Ellie no cedía en su decisión. Y como no lo hizo, optó por dormir a Andrei, lo que provocó la reacción de Dafne, quien ahora también se había ofrecido para su sacrificio. Llegaron incluso a una pequeña contienda en la que acabaron todos incapacitados por los sortilegios de la chica, ofreciéndose como sacrificio sin discrepancia alguna, ya que nadie podía objetar debido a los sortilegios enajenadores. El Titiritero devolvió a Summer sin necesidad del sacrificio de Ellie, ya que los cuatro se habían propuesto a dejar atrás sus propios intereses por tal de traer y salvar a su compañera, siendo la verdadera opción correcta para que los cinco pudiesen continuar en las pruebas, aunque no volverían a tener una oportunidad así.
En el regreso de Summer, la chica se lamentó porque nadie debía sacrificarse por ella por sus propios errores, estando casi al borde de las lágrimas cuando pronunciaba aquellas palabras. Pero lo hecho, hecho estaba, y el grupo podía continuar hacia la última de las pruebas. Sin embargo, Andrei consideraba una vergüenza que no hubiese podido resistir y su voluntad decayese ante un sortilegio de dormir. Esta debacle en el chico de 4ºB continuaría hasta la presentación de la siguiente prueba, ya que si bien lograron convencerle al principio para que siguiese y protegiese al grupo, este dijo que lo haría mientras siguiesen siendo un grupo, un hecho que sería mencionado en las reglas de la prueba número tres. Consistiendo en enfrentamientos uno contra uno, en esta prueba no habían equipos algunos, tan sólo la individualidad contra el rival que te tocase luchar. Una sola victoria era suficiente para poder pasar dicha prueba y con cada derrota el participante tendría varias oportunidades según la evaluación de los profesores en las dos anteriores pruebas. Ante ese panorama, Andrei tenía la intención de rendirse y no luchar, pero la insistencia de David y Summer, le convencieron para poder luchar con todas sus fuerzas, junto con el apoyo de sus compañeros de 4ºB, quienes también se acercaron para ayudar a su amigo.
Con todos yéndose a descansar antes de los enfrentamientos, menos Summer que se quedó allí con la intención de hacer algo, termina el día y la antesala de la última de las pruebas.
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